El número nos define. Hace tiempo se puso fecha, la del número correspondiente a este año, para reducir la pobreza y sus avatares en el mundo. Pero los números, tan falsamente exactos, no cuadran con los objetivos propuestos. Y aún con ese descuadre se habla de avances. Según los dictados de los números los grandes países de Asia han conseguido, con su crecimiento económico selectivo, que los números globales parezcan más amables, menos pobres. ¿Podemos creer que no continúa existiendo un inmenso número de pobres entre sus propios habitantes? Los números son capaces de dar a conocer que hay demasiados pobres en Africa, pero pretenden decir que no hay demasiados en América. Y en el mundo desarrollado hay un número indeterminado de ellos, pero los números no son capaces de incluirlos. Quien haya tenido la oportunidad de recorrer un poco el mundo con los ojos mínimamente abiertos ha podido constatar que la pobreza es la auténtica reina de nuestro pequeño universo, que la global...